Una semana redondita

Entre las cuerdas en los dos frentes, el triunfo clave por Copa Sudamericana sirvió como trampolín para acentuar la levantada en el torneo local, con empate en la Bombonera y victoria muy necesitada contra Central. El Grana salió del fondo de la Zona B y el domingo visita a Godoy Cruz.

Cuando las papas quemaban y todo parecía al borde del colapso, Lanús sacó fuerzas y revivió como el ave fénix. A tal punto que, en seis días, erigió una levantada impresionante desde lo futbolístico y también traducida a resultados.

El triunfo clave 3-1 ante Barcelona de Ecuador, rival directo en el Grupo A de la Copa Sudamericana en busca del primer puesto, sirvió como trampolín para el equipo de Jorge Almirón, que ratificó ese cambio de cara en el torneo local.

El Granate visitó la Bombonera en el fondo de la Zona B de la Copa de la Liga Profesional y se trajo un empate 1-1 que cortó una racha de tres derrotas consecutivas. Sin embargo, los ocho partidos sin ganar seguían pesando en el plantel, que por fin se reencontró con la victoria ante Rosario Central, en un choque de necesitados.


Con el 3-1, Lanús dejó en el último puesto al Canalla e igualó la línea de Arsenal, con 10 puntos. A uno quedó Vélez y a dos tanto Huracán como Godoy Cruz, próximo rival. El domingo a las 21:30, por la fecha 12, será turno de visitar al Tomba en el estadio Malvinas Argentinas, con arbitraje de Pablo Dóvalo. Cuatro días más tarde, se viene el viaje a Uruguay para el duelo copero frente a Montevideo Wanderers.

A la vuelta, el Grana recibirá a Independiente, casi con seguridad el domingo y en horario a definir. El miércoles 4 de mayo tiene una parada brava en Guayaquil y, el siguiente fin de semana, cierra su participación en el certamen doméstico ante Central Córdoba, en Santiago del Estero. Sí, todo bien movidito.

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