En la semana del clásico con Banfield, Fortaleza Granate compartió una charla a fondo con Rodolfo Graieb en un vivo de Instagram, palpitando el encuentro de mañana a las 16:15 en el Florencio Sola.
El ex lateral derecho de Lanús, Rodolfo Graieb, comenzó haciendo un breve repaso de su presente. Actualmente junto a su hermano, Diego y Cristian Pino, están trabajando en un proyecto que recluta jugadores de fútbol y los inserta en clubes no solo de AFA, sino que también en el exterior. “Les damos la oportunidad a los jugadores y ellos la aprovechan a través de la gestión deportiva que realizamos con nuestra empresa. Fundamos un club en Córdoba que se llama Villa Libertador, donde miramos a los jugadores y tratamos de sacarlos afuera. Es una etapa muy linda, estamos aprendiendo y también nos permite tener otra relación directa con los clubes”, detalló.
Respecto a la relación que tiene con Lanús a partir de su retiro de las canchas, Rodo confesó: “Siempre que estoy en Buenos Aires voy para el club, con esto de la pandemia es lo que más extraño. En mi caso, a diferencia de los que dicen que es su segunda casa, yo lo interpreto más como un hogar, porque la casa es la edificación o la estructura, mientras que el hogar es la familia. Y yo, cada vez que voy me siento en familia”.
Mención aparte para la relación que tiene su hijo Agustín con el Granate: “Tiene 19 años y es fanático. Recuerdo estaba ahí metido en medio de la arenga, él vivió ese campeonato del 2007 desde adentro”.
En cuanto al clásico y la manera de vivirlo, el Soldado Heroico manifestó: “En mi carrera me tocó jugar en cuatro clubes y los clásicos los viví de una manera muy especial. Ahora lo que me pasa con Lanús, es que me llena de otra forma, aprendí a hacerme hincha”. Y agregó “No sólo lo vive el jugador de fútbol, la gente también lo vive. Me pasaba a mí que la gente me cruzaba en la calle y me preguntaba cómo llegábamos para ese partido. Y yo jugaba pensando en el día después, que iba a pasar, si iba a poder cargar al que es hincha de Banfield”.
Específicamente sobre la semana previa, Graieb añadió: “Esta semana es especial, Agustín está loco, yo me despejo un poco con el trabajo. Para el hincha no es un partido más y lo vivió así cuando jugaba. Era un partido diferente a todos. Futbolisticamente hablando, vos podes venir bien o mal, pero estos partidos se juegan con otra cosa. Los clásicos se juegan con la cabeza y con el corazón y eso los hace diferentes”.
En otro orden, el ex defensor analizó cómo llegan ambos equipos para el sábado. Por el lado del Taladro, reconoció: “Este banfield es el mejor que de hace mucho tiempo. Entre su entrenador y los jugadores han encontrado su funcionamiento. Tiene jugadores del riñón del club, que se adaptaron a la idea del técnico. Aunque eso hace que no tengan tanta experiencia en cuanto a clásicos. Si bien tiene referentes, son pocos”.
Mientras que de Lanús, observó: “Ha ido de menor a mayor, junto con Luis que es del riñón del club. También tenemos al Laucha (Acosta) que es nuestro máximo referente y al Pepe (Sand), son tipos que han ganado muchas cosas y pueden absorber ese nerviosismo que puede tener un joven ante un clásico. Nosotros tenemos muchos chicos que juegan bien y esa es la carta favor que le veo a Lanús para este partido”. En esa línea profundizó: “Los gestos y lo que hace el Laucha dentro de la cancha es a propósito para sacar presión al resto y el Pepe, con el peso específico que tiene, al estar parado como un 9, sabiendo lo que significa para Banfield, se van a cuidar en eso. Esos dos focos grandes van a tratar de liberar de presión a los más chicos que juegan muy bien para que se puedan mostrar, tratar de ganar y escribir su historia, porque a partir de estos partidos importantes es donde uno empieza a escribir su historia”.
Por otra parte, Rodo se tomó unos minutos para recordar del primer Banfield – Lanús que jugó Sand. Vale destacar que el segundo gol llegó desde un lanzamiento suyo: “En ese partido Cabrero nos dijo que Banfield se partía a la mitad y nosotros teníamos que recuperar en la zona media y tratar de asistir rápido al Pepe, porque cuando giraba era muy difícil de obstruir. Por eso hice eso, sabíamos la consigna de lanzar rápido y nos salió bien”.
Sobre la relación con los actuales referentes del plantel, expresó: “Hablo muy seguido con el Laucha (Acosta) y con el Negro (Sand), los quiero mucho y tengo una relación especial, después de tanto tiempo y todo, ellos lo viven y lo disfrutan a su manera. Este clásico también puede ser el único para Pepe, así que debe ser especial para él también”. En lo tocante al retiro de Sand, mencionó que habla con el goleador y contó su experiencia personal: “Si bien disfrutas de otras cosas, no extrañas tanto jugar el partido, lo que se extraña es la gente cuando vos entrás a la cancha o a un estadio y las cosas que vivís como jugador cuando entras a un vestuario”.
Con respecto a la falta de condimento que le da jugar sin público, el oriundo de Río Ceballos describió: “Cambia mucho en el estado de ánimo del jugador. A mi no me tocó jugar en pandemia, pero me ha tocado jugar sin público por suspensiones u otras cuestiones y es horrible. Se escucha todo y te perdés del folclore, la bandera, la gente llegando al estadio. Al clásico lo empezas a vivir cuando vas llegando en el micro, ahora llegar y ver el estadio vacío debe ser horrible, aunque después los intereses son los mismos”.
Acerca del hecho de que hayan debutado tantos juveniles en el último tiempo, Graieb destacó que es parte de la coherencia con la que se trabaja en el predio de Cabrero y Guidi. “Los chicos no debutan porque se le ocurrió al entrenador, es parte de un proyecto. El club tiene una materia prima, se pulen los errores y tratan de que lleguen lo mejor posible. Todo el trabajo que se hace se ha ido perfeccionando con el tiempo. Lo fundamental es el trabajo del captador, que es el que busca al jugador para que esté en el club y de ahí nace todo”. En consecuencia, remarcó: “Hay una serie de cosas que las interpreta y las conoce el que trabaja de eso. El que tiene cualidades técnicas es más fácil resolver alguna problemática que tengan externas y eso es lo que hace bien Lanús, la captación, los formadores están capacitados para eso. Cuando llegan a la Primera, el primer premio es para los entrenadores que están abajo, los que contienen y sobre todo, el trabajo social que realizan es lo que ha impulsado a que suceda”, fundamentó.
Sin olvidar lo que significa su nombre en el club y para los jugadores que visten la casaca Granate, el cordobés de 46 años repitió un consejo que le da a los juveniles siempre que tiene oportunidad: “No hay que perder la humildad, tienen que saber de donde salieron, quien hizo esfuerzos para que vaya al club. No tienen que nublarse con una cámara o poder comprarse el mejor auto apenas llegan. El primer sueldo es para la mamá, comprar una casa si no la tiene y después va a haber tiempo para el auto. Esas cosas sé que en Lanús se las dicen, que tienen gente que trabajan muy bien con eso y en otros club eso no pasa”.
En ese sentido, señaló los valores con los que se forma el Semillero Granate: “Muchos viven en un entorno que no es conveniente y hay que sacarlos de ahí. Para eso está el trabajo de los clubes y por eso hablamos de Lanús como familia. Me saco el sombrero con el trabajo social que hacen y me pongo más contento por eso, que cuando llega un pibe a primera. Nadie menciona a cuantos chicos saca de la calle, después si sacamos buenos jugadores, bienvenido sea porque te permite sostener la estructura”.
Referido al encuentro por Copa Sudamericana contra Defensa y Justicia, aseveró: “Estaban viviendo la final como tal. En los partidos suceden cosas y no fue el Lanús que todos esperábamos. Yo lo viví como un hincha, pero también lo tomo como un aprendizaje para todos este plantel joven. Hay chicos que están gateando, otros empezando a caminar y otros que están empezando a correr, cuando se junten el que está empezando a correr con el que está empezando a gatear y mantengan el nivel, ahí vamos a hacer la diferencia que es la que está buscando Luis y ya lo sabe”.
Además, también analizó a los jugadores surgidos de la Cantera Granate. “Juegan todos bien, aunque considero que algunos están un escalón más arriba que otros. A Aguirre lo veo muy bien y me encanta. Orozco es otro jugador que me gusta, desequilibra y tiene gol. El flaco López, creo que es uno de los candidatos a ocupar un lugar dentro del equipo. El arquero es sobrio y técnicamente impecable”.
A su vez, se refirió a Alexandro Bernabei: “Cuando entienda que no siempre tiene que estar al 100% y que en momentos hay que bajar un cambio, va a jugar afuera, porque tiene la dinámica de Europa”. Respecto a Pedro De La Vega, remarcó: “Había clubes que querían pagar millones por su pase, pero hablas con él y tiene cabeza. Nunca se mareo, Luis lo va llevando de a poco y aunque algunos lo quieran apurar, él va a tardar lo que tenga que tardar pero va cumpliendo con las etapas”.
En cuanto al marcador central, Matías Pérez, reconoció que aún le faltan partidos en Primera y lo explicó en una comparación con Lautaro Valenti: “Es un jugador que tenía una pegada excelente, de arriba anticipaba e iba fenomenal, por ahi tenia errores que uno de afuera dice que no los puede cometer, pero todavía tiene la edad para equivocarse. Le pasa a jugadores de selección. Los centrales se afirman y consolidan cuando minimizan el error y son efectivos. Lo primero es marcar y después jugar lindo y hacer lo que te pide el entrenador”.
Volviendo al encuentro del sábado y al planteo con el que está saliendo a jugar Lanús, observó: “Me gusta el planteo táctico del 4-4-2 porque los dos que están por fuera tienen características ofensivas. Lo que cambia es el retroceso de los extremos, si retroceden y se suman a la línea de volantes, más allá de las características que tengan, van a seguir colaborando. Según la característica del intérprete es lo que te puede cambiar el sistema, que para mi, se aproxima más a un 4-2-4, como jugábamos nosotros cuando salimos campeones en el 2007”.
Para finalizar, agradeció al hincha de Lanús que le tiene mucho cariño, que lo recuerda con afecto y se lo hace notar por las redes sociales y admitió: “En un momento quise dirigir, me fui capacitando y siento que las puertas de Lanús van a estar abiertas. Ojalá en algún momento pueda estar ligado en el club, hay cosas girando alrededor”.
Por: María Vázquez