El 11 de diciembre de 2013, Lanús se consagraba campeón de la Copa Sudamericana tras vencer a Ponte Preta en la final. A dos años del tercer título en la historia del Grana, recordamos el camino que transitó el equipo de Guillermo Barros Schelotto hasta la tan codiciada conquista internacional.

Hace apenas cinco días, Guillermo Barros Schelotto dirigía por última vez a Lanús en el Bosque platense. El triunfo 2 a 1 en la hora contra Gimnasia será recordado por sellar la clasificación a la Copa Sudamericana, ese mismo certamen continental que el Melli levantó con sus propias manos hace exactamente dos años, en 2013.

Aquella noche calurosa del 11 de diciembre, el Granate derrotó 2-0 a Ponte Preta con goles de Víctor Ayala e Ismael Blanco y, tras el empate 1 a 1 en Brasil, se quedó con el tercer título de su historia. Fue la segunda estrella en el ámbito internacional, después de la Copa Conmebol 1996 que conquistó en el Campín de Bogotá ante Independiente Santa Fe, el mismo rival que viene de ahogarle el grito de campeón a Huracán.

Las 40 mil almas granates que reventaron la Fortaleza de Arias y Guidi jamás olvidarán esta vuelta olímpica. Por ser la primera en casa y por el equipazo que había conformado GBS, con el equilibrio exacto entre experiencia y juventud. La seguridad de Marchesín, la garantía defensiva en la dupla Goltz-Izquierdoz, dos laterales con vocación ofensiva como Araujo y Velázquez, la figura cerebral de Somoza para manejar los tiempos, el corazón de un volante con llegada al gol como Diego González, la aparición desequilibrante de Junior Benítez por la lesión de Acosta en los partidos decisivos, el sacrificio de Silva y el aporte colectivo que llevó a una consagración merecida.

El primer paso: Racing

En la fase inicial de la Copa, Lanús aniquiló a la Academia con triunfos 2 a 1 en Avellaneda y 2 a 0 en la Fortaleza. Lucas Melano y Silvio Romero -luego vendido a Jaguares de México- convirtieron en la ida, mientras que un doblete de Izquierdoz aseguró el pase a los octavos de final.

Baile y sufrimiento: Universidad de Chile

En la siguiente instancia, el Granate aplastó 4-0 al conjunto trasandino como local por los goles de Silva, Melano (2) y el Laucha Acosta. La revancha en el Monumental de Santiago culminó con derrota solamente 1 a 0 gracias a la soberbia actuación de Marchesín, quien evitó una diferencia mayor.

Verdugo de otro equipo argentino: River

En cuartos de final, el elenco de los Barros Schelotto superó al de Ramón Díaz con una legendaria victoria 3 a 1 en el Monumental, luego del empate 0 a 0 en el Sur. El Pulpo González (¡de taco!), Silva y Ayala metieron al Grana entre los cuatro mejores del torneo.

Autoridad para acariciar la gloria: Libertad de Paraguay

En una de las semifinales, Lanús se impuso 2 a 1 en ambos partidos ante el cuadro guaraní. Silva y Goltz de penal encaminaron la serie en Asunción (descontó un tal Gustavo Gómez, hoy en el Granate), mientras que Diego González y otra vez Paolo desde los doce pasos fueron los autores de los tantos para abrochar el pase a la finalísima.

Un sueño hecho realidad: Ponte Preta de Brasil

En tierras cariocas volvió a aparecer el gran capitán, Paolo Goltz, con un tiro libre formidable para rescatar una valiosa igualdad 1 a 1. Ante una Fortaleza colmada, Ayala y Blanco brindaron su cuota de arena en el primer tiempo para desatar la fiesta en Arias y Guidi. Lanús campeón de la Copa Sudamericana 2013. Esa última estrella es mi lujo.