CAUDILLO SE BUSCA

Fernando Amorebieta es el apuntado número que tiene en carpeta Lanús para reforzar la defensa. El experimentado central venezolano de 33 años, sin lugar en Independiente, tiene el visto bueno de la Dirigencia Granate y de Ezequiel Carboni. Sin embargo, primero deberá bajar las pretensiones económicas. A tal punto, que en el Rojo es el segundo sueldo mejor pago del plantel, por detrás de un viejo conocido: Silvio Romero. Hay esperanzas por el Sur de que se dé, pero saben que no será fácil ni rápido.

“Nosotros no podemos pagar el pase ni un préstamo, pero nos avisaron que no lo tendrían en cuenta y ya elevamos una oferta a su agente”. Palabras clarísimas las de Nicolás Russo, máximo dirigente de Lanús, en diálogo con Infierno Rojo. Ante la desesperada búsqueda de reforzar la zaga central, el Grana va con todo para traer a Fernando Amorebieta. Es que el defensor de 33 años fue separado del plantel de Independiente. Ariel Holan, el mismo que lo convenció hace un año para venir al conjunto de Avellaneda, le soltó la mano. ¿El motivo? Necesita liberar un cupo para incorporar al volante Richard Sánchez, de Olimpia.

De esta manera, es casi un hecho que le rescindirán su contrato y así quedaría con el pase en su poder, lo cual le permite al Granate entrar en escena.
A favor, Lanús cuenta con el pulgar arriba del experimentado defensor venezolano que quiere quedarse en Buenos Aires ya que se encuentra muy cómodo junto a su familia (le da cierta ventaja con los otros clubes interesados, Colón y Belgrano). La traba, al momento, es nada menos que la parte contractual. Amorebieta tiene un sueldo muy alto en Independiente, a tal punto que es el segundo mejor pago del plantel por detrás de Silvio Romero (el Chino, ex Lanús).

El marcador central de 33 años, con un pasado fuerte en la Liga Española donde defendió principalmente los colores del Athletico Bilbao, varias temporadas en la Premier League (jugó en el Fulham y en el Middlesbrough del 2013 al 2016), y de trayectoria internacional con el seleccionado vinotinto (jugó la Copa América de 2015 en Chile) es el tipo de refuerzo que buscaba Lanús para la última línea. “Si baja un poco las pretensiones económicas, se va a dar. Hay que esperar un poco”, confían desde la CD. Carboni lo espera con los brazos abiertos.

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